Entrelazar la mirada en esa cumbre de terciopelo escarlata,
de la sombra que se desliza para cambiar la luz del escenario.
Un horizonte plagado de infinitos,
muerden las nubes su caparazón sangrante, un cielo degollado.
El dominio de la vista sobre las lágrimas vertidas, divertidas,
como si a la bella luz del ocaso, acaso los sueños.
Enfrente de la maravilla responsable que cada anochecer
pinta en el escenario la luz decolorada de las estrellas.
Y como en un teatro; el drama lunático de un amor irresponsable,
todavía sin título, una mera idea.
Un queso y la luna, para hablar de nuevo.
De cualquier nosotros en algún descanso.
Pimienta y escarcha, como tos del alma.
Empieza a picarte en las partes rojas.
Antojo de amor, la flor de sus hojas.
Auroras de piel de manos preciosas.
En la muchedumbre entre gente extraña,
una voz de araña escribe en la tela,
como una cortina, que se abra el telón.
Intermedio del ensayo, o en medio de otro intermedio
Una onomatopeya hiperbólica que venga a decir de la nada ¿Para
qué?
Es un eco asqueroso de la voz de sus deseos, escucha como gime como si
fueran de vientos, simples y fluidos con cuerpos de forma, como horma al alma
que calza y da el paso, me canso enseguida
¿Quién cuida de mí y hace que descuida?
Orgullo inmerecido de los muebles
Un cajón lleno de armarios
Pasaba un ladrón y ladraba un perro
Perno de campana de una de las doce
Y en aquella tierra tu desolación echaba raíces
Nunca lo compliques para resolver
Y otra vez implica de nuevo lo incierto
Es el mismo eco, seco como el asco
Y otra vez lo mismo, le dijo después en el descansillo, un clavo
preciso que hace de punzón, silba en el pulmón escupiendo sangre, otra vez le
dijo
Cobijo su sangre la guardo en botellas
Mejor cosecha a fecha de hoy:
Esta era la nuestra la muestra completa
Mañana chuletas en tiendas vampiras,
pida extra de carne de la muestra viva
del genoma mida la piel de sus lomas
¿Qué hacer con el cuerpo si le pide el alma?
Oh, calma muchacho y le daba moscas
Focal de la luna de diapositiva
Y a la voz veía que oía la muerte
Suerte de lamentos en aumento de ay, es que no haya nada y llorar por
todo, todo es puro drama, arráncame la vida, salgo del guion, dile al director
que nunca esta toma, en coma profunda, tanto el fundamento
y en algún asiento alguien aplaudió
Talento intentado, que tienta la obra...
Ojalá le afecte tanto como a mí
Como un colibrí encanta leones
Luego se los zampa al caer la noche
Se sirve del coche para hacerse a Bowie
Tundra una meseta, una fotografía muy mal ampliada
Por cada ventana cerraba una vista
Una vena artista fluyendo mil veces
Teatrillo malo del mundo de plomo
Una caja de música para arrancar la bailarina.
Mañana en la fiesta quizá seguirá
Descalzo y dormido capitán de plomo
Y así chiquitita hacía su magia, su llanto brillaba
que al grillo en su canto,
le cantaba al cielo.
Dolor del amor por favor mis moscas
Tosca gravedad de hacerlo en gusano
Ni es sano asqueroso, yo también lo quiero
En la cuenca escupa su cupo de alma
Le supo a la gloría de hacerse de muerte
Tiras horrorosas acosando miedos
Y en el suelo extraño de un año o de dos de dedos de cientos
Al llanto de alientos de miles llorantes antes de llorar,
del dolor del tiempo que pone al pensar
Llama la atención corpachón de alfombra.
La ruleta mágica de las vueltas.
Sueltas al desequilibrio se fueron cayendo
revueltas y osadas, pompas de jabón de atención un culo...
el ojo disuelto que mira la ducha y escucha latir su limpio de culpas
Al postre de antojos; una bofetada
La pasión cebada, ciega por sesión, su pasión ladina
Su rabia caníbal de un mundo de pruebas
Le dijo ultratumba y se hizo el tumbado
Y pasó a su lado y se lo comió, sus sesos de helado
Y en algún verano su hielo de tripas una realidad
tan real mentira de lo artificial
Pegado a una cara se hacía una mueca
Déjame ver tras la máscara esa cara fea
Fea exposición todo fue horroroso
Un acoso abuso que presumo poco
Y al loco la cárcel, libre de asesinos que se hacen de gente,
que miente y que mata
Una mala hierba que mató mil años
Ceños vespertinos de amor al empeño
Con sueño en los ojos rojos de sus besos
y al velo espesura que dura en la cama
que ama y madura
Ronca en la abadía al rumor de noche en su habitación
Todo el mal oscuro puro como el día
Paró en una acequia para echar el cadáver
El arma asesina en manos del cura, de libre el pecado
Hoy se lo ha tomado como mano de dios que cumple sentencia
Un dios vengador que enseñó al diablo, que malo es humano,
genoma del monstruo, que acepta en la toma la alforja del caso
que acepta la toma forma de casilla
Algunas cosas no cambian nunca porque no pasan
Métrica del asco su saco mentiras
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