Su ente superior olvidadamente
Lo intentó dos veces para hacer ya cien
La fuente al pasillo de los centelleos
Caligrafíame como la estampa de una inercia liviana
Algo en la mañana de la que no salgo
Un talgo a Manhattan de liendres de galgo
En una maleta con sangre de historia
Alarmas de virus de furias dormidas sometidas a ondas de ahondas la herida
Su puro carácter de hacer sanguijuela
La tutela inmediata de su cádaver a una cadena de comida rápida, que tarde se come pero crujientes y ricos sus picos de harina, como haría un cerdo para cerdo un hombre que se come igual a la vez caníbal por harta frecuencia de una radio en off de todos los ratos...
Abstracto
No notas, no notas musicales
La atención grabada de palabra digna
paradigma humano, la mano de luz le daba más sombra
O presión presidio de la precisión
Al terror urbano un gramo de sangre
Al encantamiento canta en la virtud de la indiferencia
Como una injerencia menor que estorba a otro plano
Platillos creyentes
Hermano creyente un fiel mentiroso
terroso cacharro al charco de un dios
jugando a muñecos para dar la vida
como prometida de toda atención,
pues ponlos con hilos y así marionetas...
Cajas de música graduada para morir como bailarina de plomo
La casa de muñecas maldita
metido al papel como una palabra
como una asonancia hueca al pleno de los ecos
o una catástrofe irremediable hable del futuro
al diablo fraile de culto a Satán ¿De esto es el infierno?
Fraguas de las corrientes vesánicas de sus desarrollados derechos
Hecho para humano
Como tal desecho de solicitud ¿Cuenta la ignorancia
lo que no sé acuerda? Cuerda de los cuellos
Sogadicto le dijo al cadáver colgado
Humor negro de las tinieblas, lecciones de invierno
En eterno y triste aprender infiernos que no dan para luz
Un final testado, punto testarudo
No hay comentarios:
Publicar un comentario