Todo le que has sido en algún momento en el monumento de tu merecido un lugar seguro y amor en exilio en el domicilio de jurar tu cuerpo Poco o mucho es amor y escucha lucha por lo amado domado domador al final rendido, que la magia es mucha y es lucha sin guerra en tierra baldía

es que desafía desconocedor que el sudor importa, porta portador almuerzo en los brazos, los trazos del dedo del tacto de nuevo de ese viejo impacto que amante dibuja y embruja su parte partir de la cama ama supletoria

plétora de rima que oprima la yema llena de caricia en lenta avaricia se desborda en crema

llena de fricción en el corazón a plena aventura

apertura nueva y otra vez adentro encuentro blasfemas y flemas del gusto

Anatema y ano Temprano de mierda

En el vano oscuro se escondía ufano Albano Romira se mira su abajo el atajo vista dista cimbreante la mano galante al guante de espasmos al grito emergente al diente descrito sus escritos mueren en los aledaños Años de pasillo

Libros de librillos en los calzoncillos se hincha la ilusión alusión de hoja acoja querido, al nido de entrañas a tela y arañas y cañas y bares y calles deseos del amor perdido

en el recorrido de unas cuantas penas otra la más nueva cuando llueva llora Adora dorados adorna duraznos Plus de pus tardía la filosofía de su pleitesía Oliva libada chupada hasta el hueso

Platos de aceitunas y el sabor que prima que rima la dona que doma y oprima y pica un poquito que calor sin miedo medios del fueguito lueguito la llama Que cosas más ricas y a la vez preciosas

y mira que mira remira el deseo que el efecto cobra la obra más larga en una garganta allá atragantados Ensayo de orgía en sayos menores

Memoria que enseña Dueñas de poesías La mía no era una Lamia La llamaba mía la mía que era De brujas y hadas y espadas certeras

Helada de magia de alta fantasía En una ordalía en el paraíso Permiso cedido en un compromiso Miso y aceitunas